sábado, 19 de septiembre de 2009

Hoy me hicieron recordar... (Jueves 19.Sept.1985)

Creo que no les ha contado mucho de mí. No era necesario (y de hecho, no lo es) para los propósitos del original "Proyecto Unicornio". Pero hoy varias personas, algunas sin querer, me recordaron una fecha muy relevante en mi vida.

Adivinaron: un 19 de septiembre como hoy, pero de 1985. Fecha de uno de los terremotos más devastadores para la ciudad de México en toda su historia.












Una de las causas del surgimiento de los Caballitos con Cuerno, fue ESA fecha. Y otra de las razones del lento (demasiado lento, para mi gusto y el de muchos) despertar de los compadres mexicanos, lo fue también ese día fatídico.

Amig@s y compañer@s. Alumn@s y maestr@s. Colegas y heroic@s desconocid@s, que nos hermanamos por días y luego... nos despedimos.

Les confesaré algo, aquí entre nos... oficialmente, negaré haberlo contado, estamos? (jejeje, ya parezco político en intermedio de entrevista televisiva!) En esos días aprendí muchas cosas, entre ellas... ejem! (a ver si mi imagen de Hombre-Caballo-Con-Cuerno BPP/MVM/VNMR3 no se ve denigrada!!!) a... llorar sin motivo, sin pena, en compañía. Al escuchar una canción en la noche, tratando de distraer, de alejar el pánico creciente, la sinrazón aparente. Les cuento:

Había, entre los universitarios que ayudaban en los albergues, un casi-colega fuera de lo común: estudiaba para físico y para cantante de ópera. Una noche, tratando de animarlos, comencé con una de las historias que me sé. PERO... Minutos después, inició la segunda gran réplica del terremoto, y el miedo y el pánico empezó a apoderarse de los presentes. En ese instante, alguien empezó a intentar orar, diciendo "... ojalá que amanezca, ojalá que se vaya el miedo y esta oscuridad!!!" Mi camarada y yo, recordando la historia que estábamos relatando (y que alguna vez ya les conté en ESTE POST), y creo que más por temor que por inspiración, comenzamos a cantar una aria y entonces...

La leyenda cuenta que, cuando acabamos de cantarla (y el albergue donde estábamos, de retumbar: mis cuates tenían buenas voces!) el pánico, el olor a miedo y humedad y polvo, el cansancio y hasta el pesimismo, habían desaparecido.
(Y, sí: "cuando despertamos, el terremoto de réplica ya no estaba ahí", jejeje!)

Nunca olvidaré ese momento. Como les decía en el ante-anterior post, la magia de la música siempre me ha sorprendido y la he amado... pero pocas veces había sentido su PODER. Así, de fácil y así de sencillo. Incluso la letra de aquélla legendaria aria, nunca la olvido (la traducción, entre paréntesis. De nada.):

Nessun dorma, nessun dorma!
(Que nadie duerma, que nadie duerma!)
Tu pure, oh Principessa,
(Tampoco tú, Princesa,)
Nella tua fredda stanza
(en tu frío cuarto)
Guardi le stelle
(Mira las estrellas)
Che tremano d'amore e di speranza.
(Que tiemblan de amor y de esperanza).
Ma il mio mistero è chiuso in me,
(Pero mi misterio lo llevo dentro de mí)
il nome mio nessun saprà!
(Nadie mi nombre sabrá!)
No, no,
sulla tua bocca lo dirò
(sobre tu boca lo diré)
quando la luce splenderà!
(cuando la luz vuelva a resplandecer)
Ed il mio bacio scioglierà il silenzio
(Y mi beso romperá el silencio)
che ti fa mia!
(que te hace mía!)

CORO:
Il nome suo nessun saprà!
(Su nombre nadie lo sabrá!)
E noi dovremo, ahimè morir, morir!
(Y nosotros, ay, deberemos morir, morir!)

Dilegua, oh notte!
(Desaparece, oh noche!)
Tramontate, stelle!
(Ocúltense, estrellas!)
Tramontate, stelle!
(Ocúltense, estrellas!)

All'alba Vincerò!
( [porque...] Al Alba Venceré...!)

Vincerò!
(Venceré...!)
Vincerò!
(Venceré...!)



(Digo... no nos comparamos, pero nos defendíamos bien! La adrenalina, sabrán...)
(Para oirlo mejor, pongan Pause en el cuadrito de música, arriba a la derecha.)
(Pueden interrumpirlo a los 3'24". Gracias por su atención).

(Y jornadas después, al amanecer de un nuevo día, la Vida superó a tanta muerte: se rescataron personas, niños y ¡bebés!, ¡vivos!)

Se que muchos no gustarán de este género musical, la ópera. No se trata de cuestiones elitistas o de poco cultivarse musicalmente. Se trata de "sentir", de permitirse que las notas y las vibraciones de la voz humana, herencia de todos nosotros, pase por el oído, hacia el cerebro y se anide ahí, en ese rinconcito que está entre el espíritu y el corazón. ¿Me comprenden?

Si no, no es tan importante. Un día lo sentirán. Después de todo, parece que esa hermosa aria sigue teniendo sus efectos en la gente (¿Recuerdan este famoso video? Adelántenlo al tiempo entre 0:30 y el 2:30, para apreciar el efecto. No se compara a la versión del video anterior, pero el punto es el efecto que causa. ¡Gracias, Puccini!)


Pues bien, en aquellos días me pregunté: y qué vamos a hacer con todo lo que perdimos?! ¿¡La gente buena, los futuros médicos, los ilusionados estudiantes de ingeniería y medicina, que podrían haber hecho grandes cosas por este país?!

Y en ESOS días aciagos, en otra madrugada, varios nos hicimos la promesa de burlar al destino, de hacer TODO lo posible por compensar los caídos. Estábamos tristes, desconsolados y MUY enojados (el gobierno y sus inútiles empleados, incluyendo el idiota jefe de gobierno de México, D.F., y el no menos imbécil y cobarde presidente, junto con los funcionarios que robaban la ayuda internacional... ¡malnacidos!). Pero también había un aire de fortaleza, de saber que si siempre estuviéramos así de unidos, así de enfocados, así de conscientes, nada podía detenernos (ni siquiera nuestras ¿autoridades? ultrapendej... perdón, es que nomás de acordarme). Y ahí fue...

...cuando entonces, los que de algún modo compartimos esos días de terror y esperanza, decidimos multipicarnos y tratar de compensar todo lo que ya no harían nuestr@s querid@s compañer@s. Pensamos: "*%&inche muerte, #%!uta suerte, no se van a salir con la suya tan fácilmente!".

Es necesario que haya sucesos tan dramáticos para que la gente se concientice y trate de hacer mejor las cosas?

Por eso, en estos tiempos tan "interesantes", quisiera que recordáramos otra vez que NOSOTROS tenemos la capacidad de hacer cosas mejores, A PESAR de la idiotez congénita de nuestras "autoridades". Insisto: hagámosles saber que ya no les va a ser tan fácil deshacer nuestro querido país entre sus inútiles y ambiciosas pezuñas, digo, manos!

Ayudémonos a decirles, como en aquella lejana, pero presente para muchos, madrugada de septiembre de 1985: "*%&inche muerte (y ahora, *+&inches #%utos políticos!!), no se van a salir con la suya tan fácilmente!".

Con el corazón arrebatado y memorioso, se despide con afecto (y coraje... ya me acordé!),

el sudoroso (¿¡de los ojos?! Mmmhh, debe ser el calor...!) Caballo con Cuerno en Ristre...

26 comentarios:

marichuy dijo...

Mi estimado Unicornio

A que ni sabe? Parece que nos pusimos de acuerdo; yo publiqué una entrada sobre el mismo tema (y mire que sábado yo casi nunca posteo). Así que retomando su mensaje final (que se parece al mío), le diré mi pesar:

¿dónde carajos quedó ese espíritu de unión, acción y fortaleza? ¿Por qué ahora que el país se nos cae a pedazos (sin necesidad de terremotos), aparecemos apáticos, como anestesiados... como si sólo estuviésemos esperando arribar al despeñadero?

Un abrazo tembloroso .

CRISTINA dijo...

Al hablar de la música en esos momentos tan duros he recordado lo que me contaron una vez en S. Petersburgo, cuando durante todo el terrible asedio que sufrió durante la 2ªGuerra Mundial, nunca en aquél entonces Leningrado, nunca dejó de sonar la música en teatros, en la radio, en la calle incluso. A pesar de la guerra, del hambre, del frío, de la muerte constante.
Hay ejemplos de superación personal e incluso colectiva aún en las peores situaciones.

Un saludo.

Menospausas dijo...

Caballito de un cuerno, tengo amigos de esa edad de la Universidad que estuvieron en esos albergues prestando ayuda, es un reconocimiento hermoso,para aquellos que dedicaron su tiempo, no puedo más que poner lo mismo que puse en el Blog de Marichuy, así que cual copy paste aquí le va:

Yo solo puedo decir que es un día que duele en el recuerdo, pero que nos hace pensar un poco, solo un poco en esos hermosos ciudadanos de un país que se unieron, que ayudaron los albergues, que dedicaron horas de su tiempo con todo y el pánico que sentían en ayudarse mutuamente, cuando pienso en este país, cuando pienso que estamos en el hoyo a veces me acuerdo de ese día, de esas caras de personas ayudando y me sale un rayito de esperanza, que no sea la naturaleza la que nos haga ser solidarios y unidos, que sea siempre y todos los días, porqué gracias al ciudadano de a pie fue que se pudieron salvar vidas, porqué fue el ciudadano de a pie de todo el país que aporto un granito de arena para ayudar.

Si, lo recuerdo a veces sin ser 19 de septiembre. Y recuerdo que ese día nacieron niños que hoy son hombres y mujeres que hicieron un milagro de vida al sobrevivir.

Saludos por ser un estudiante cantando en un albergue para ayudar a otras personas.

Un Abrazo querido y admirado Unicornio

Unicornio dijo...

Sí, estimada Marichuy, parece que la idea se dispersó por muchas partes. También acabo de leer algo en "El Fanzine", otro blog muy disfrutable y destacado, como el de ustedes.

Supongo que, en nuestros peores momentos, tratamos de obtener inspiración recordando algunas de las horas más amargas, cuando parecía que no había remedio, y sin embargo pudimos de algún modo salir adelante, y aparte con más fortaleza.

"Es como en las grandes historias...", contaba Sam a Frodo, en una de las escenas más memorables de "El Señor de los Anillos: Las Dos Torres". Y supongo que así pasa con el resto de los hombres.

Siempre he creído que el Hombre necesita de los mitos, para ayudarse a explicar incluso su propia existencia, su razón de ser. Mientras esa fecha no se convierta en un panfleto, como ocurrió con el 2 de octubre (¡no se olvida!???), quizás algún día no muy lejano, lo recordemos como una leyenda. La Leyenda de la Ciudad que pudo renacer de sus Cenizas.

Y si eso se pudo con la tal "Ciudá de la Ejperanja"... creo que se puede conseguir casi cualquier cosa, jeje!

Sólo es cosa que creamos en nosotros mismos, y no en partidos políticos o caudillos iztapalenses, para realizarlo. ¿Podemos hacerlo?

Con otro abrazo, bien firme y con fe, se despide,

el cantaor Unicornio...

Unicornio dijo...

Hola, Cristina, cómo has estado!?

Sí, la música tiene Poder. Ahora recuerdo la leyenda de la caballería de Corinto, si mal no recuerdo, que, disciplinados y poderosos, al momento de la carga contra un ejército enemigo, al oir la música de flautas y tambores, loa corceles entrenados para desfilar comenzaron a hacer evoluciones de baile, y eso provocó su derrota.

(¿De ahí vendrá el baile tan popular del "Caballo Dorado" en México, jajaja?)

La música puede mover cosas que uno ni se imagina que tiene adentro. Completamente de acuerdo.

Un abrazo enorme y de bienvenida nuevamente, de parte del

musical Unicornio...

Unicornio dijo...

Querid@ Menospausas:

La canción, o aria, que menciono, "Nessun Dorma" (de la ópera Turandot, de G. Puccini) se ha convertido en un "leitmotiv" de nuestras ya escasas reuniones de camaradas de esas épocas. Y aún me da calor (me sudan los ojos, pa' que me entiendan. Los estoicos Unicornios NO lloran, nomás sudan. Y como NO se puede rociar antitranspirante en los ojos, so pena de quedar ciegos, pues... qué les puedo decir...).

Pero cuando nos animamos y la cantamos de nuevo, es como un himno contra la decepción y la desesperanza. Tan sólo los compases finales te hacen sentir que, después de la noche oscura del fracaso, el nuevo amanecer sin duda traerá mejores nuevas, y con suficiente trabajo (y buenas voces, jeje!), la Victoria.

Dan ganas de retar con el puño al cielo oscuro, antes de la aurora, y efectivamente decirle: "¡desaparezcan, tinieblas; largo de aquí, débiles estrellas. Que a la brillante luz del atrevido Sol, yo venceré!!!"

(AVISO: Cualquier parecido entre las tinieblas y el congreso mexicano, y entre las débiles y pusilánimes estrellas y nuestras timoratas autoridades, NO ES pura coincidencia. Gracias. Coman frutas y verduras. Aplican restricciones.)

Con un cariñoso abrazo a todos por allá (incluyendo hasta la cocina, jeje!), se despide,

el desafiante Caballo con Cuerno...

Juan de Lobos dijo...

Un aullido y un abrazo solidario.
A veces nos cuesta trabajo el entendernos, pero en los sentimientos, carajo, cómo nos parecemos.
Saludos y más aullidos, ahora de despedida.

Unicornio dijo...

Hola, Juan!

Sí, lo que olvidamos es que Todos los Hombres (y las Mujeres, but of course!) somos compatriotas de ese mítico país llamado Sentimiento.

(Y no se necesitan visas para entrar, ejem...!)

Te dejo un saludo y una visita pendiente...
Míticamente, se despide,
el rocinante Unicornio...

pilli dijo...

Que latentes recuerdos de aquel 85, yo lo unico que recuerdo es una niña de 5 años con libros nuevos, a mi papá gritandome salte de la casa mientras yo lo veia desde la ventana sin mover un centimetro de mi pequeño cuerpo, mi mama y hermana corriendo por la cocina y a un anciano hincado en la banqueta..de los dias posteriores y replicas recuerdo estar comprando algo en una plaza al sur de la ciudad cuando vino la replica..y tambien recurdo una boda en mi familia ...Aunque ahora conozco muchas historias de cambiaron vidas de personas muy allegadas a mi .. lindo blog ..muy linda rola un beso

la MaLquEridA dijo...

¡caray! me hiciste ver todo lo que paso mi esposo, cuando estuvo viendo como podían acomodar a su familia que fué damnificada y todo lo que pasó y me vuelvo a sentir chinche.
Pero, ¿sabes algo?, gracias por recordarme todo lo bnueno que puedo sacar de mi y para hacer por mi país, sé que puedo hacer algo y lo haré.

Gracias por pasar.
Por cierto la música es melancólica e hizo que los ojos se me pusieran vidriosos.
Un saludo.

Unicornio dijo...

Hola, Pilli!

Gracias por la visita. Y gracias por tu comentario.
En realidad, los recuerdos a veces son tan vívidos, que se ligan a aquélla canción y a su mensaje.

Es difícil olvidarlo, y qué bueno que así sea.

Saludos temblorosos del

Eidético Unicornio...

Unicornio dijo...

Malque:

Lo bueno es que uno quiera hacer algo trascendente por sus bienamados, y por tanto, por el país, por lo que nos rodea.

Y, sí: también me siguen sudando los ojos cada que escucho esa melodía (y más cantada!)

Saludos lacrimosos de parte del
"chinguiñoso" Caballo con Cuerno...

Anónimo dijo...

Y por qué razón nos hace llorar esa canción? Yo desde que escuché esta versión de Paul Potts tuve ese efecto (ya la había escuchado antes, creo que simplemente no la había escuchado completa o no le había puesto un poco de atención), la voz y la música llegan tan profundo, y es un evento que se repite prácticamente en cada ocasión que escucho esta aria. Es intrigante. Por qué hago algo que no me dispongo a hacer?

Unicornio dijo...

Kasabian:

Supongo que por la razón más clásica de todas: nos saca del fondo del baúl (le apodan "alma" a veces) el sentido de que, cuando todo parece estar más oscuro, el alba llegará, inexorablemente... y entonces, las cosas serán distintas (All'alba, Vincerò!).
Y aparte, Puccini "se vació" con esta partitura.
Y acostumbrados a escuchar "musiquits", cuando nos llega una Música de verdad, es cuando nos remueve lo que tenemos de sentimientos y emociones guardados... las cosas que sentimos DEBEMOS hacer, aunque nuestros prejuicios e ideas preconcebidas nos griten que NO se deben hacer...
...pero, claro, sólo es mi teoría.
¿Cuál es la suya?

Musicalmente, se despide, con un cordial saludo,

el hipotético Unicornio...

Abril dijo...

Mi meoria es corta con respecto a ese tema... de hecho, yo no estaba todavía en México.

He leído mucho del tema, he visto una cantidad de documentales y me estremecen dos cosas: el dolor de la pérdida, pero también la esperanza de unión que se formó en ese entonces... somos un gigante dormido.

Espero que un día seamos la Nación que queremos ser.

Un abrazo.

Unicornio dijo...

Hola, Abril!

Sí. Somos un gigante dormido. Y ojalá no esperemos a que algo externo venga a "despertarnos". Ya es tiempo de que despertemos por nosotros mismos. Lo que me pregunto (y preguntaría a cada habitante de esta tierra) sería: "¿y a qué hora? ¿Será temprano o tarde?"

Un saludo afectuoso del
Madrugador Unicornio...

la MaLquEridA dijo...

Hola Unicornio, solo paso a saludar.


Un abrazo.

la MaLquEridA dijo...

Hola Unicornio, solo paso a saludar.


Un abrazo.

Jo dijo...

caballito

creo que en las desgracias es cuando México despierta y es bien feo mantenerse en un estado vegetativo ante tantas injusticias ( no por el desastre natural) sino el propio que nos vamos haciendo unos a otros...


no se.. espero que no tenga que pasar otra desgracia asi para ver otra vez de lo que somos capaces .. y seguir adormilados asi como bien dice mi marichuy


besos

Dejame que te cuente dijo...

ay amigo unicornio...ami tambien em has emocionado con este post...
tambien me sudan los ojos...
sirvan tus palabras para hacer memoria...para que nada ni nadie quede en el olvido...y las personas que seguimos vivas aprovechemos el regalo que cada dia nos regala la vida...
+

un abrazo desde el corazon.....

Raquel Barbieri dijo...

Hola Unicornio,

Por fin devuelvo tus más que amables visitas a mi espacio. Leí con detenimiento lo que contaste sobre cuando el muchacho estudiante de física y tú empezaron a cantar el aria de Calaf... y te doy un parecer. Yo creo que la energía de la ópera es enorme, tremenda y por eso nunca pasa inadvertida. O nos encanta o la odiamos, pero no hay medias tintas. A mí es obvio que me encanta y que la considero "mi música" por encima de todo lo demás que pueda también gustarme.
La ópera tiene un poder regenerativo, sanador y todo está en encontrar el repertorio que a cada persona le va mejor; Puccini, Wagner, Verdi, Mozart o Monteverdi...

Muy emotivo tu texto
Saludos :)

malbicho dijo...

lamento haber llegado tan tarde a tus recuerdos (sólo un mes después -je-, es que no tenía internet), pero qué manera tan singular de vencer al miedo, me acordé de ese término de "resilencia" que usan los psicólogos para nombrar el recurso del humor que algunas personas utilizan para superar eventos o etapas traumáticas, como en aquella película tan admirada por unos como odiada por otros: "la vida es bella"

un abrazo fuerte caballito -a ver si no resulto corneada, je-

malbicho dijo...

y muchas gracias por la flor que le echas a mi blog, que gentil eres

=)

Leticia Zárate dijo...

Yo tenía 6 años cuando todo esto pasó, vivía en el DF.
Recuerdo todo con la visión de una niña de esa edad, ojos azorados, cuestionamientos inciertos, y la inolvidable imagen de mi madre cargando a mi hermanito de 1 año y yo en calzones frente a un charco de agua que se agitaba como las olas del mar...
Por otra parte, vine a decirte que recojas un premio para tí en mi blog.

!!Ah!! (suspiro) qué recuerdos ¿no?

Saludos y un abrazo.

la MaLquEridA dijo...

¿No que ya ibas a regresar?.
Solo espero que estés bien.



Besos.

la MaLquEridA dijo...

Eh! Unicornio, ya estás bien?, dijiste que te habías puesto mal y agarrado virus, ¿estás bien?.



Espero que si.

Te mando muchos besos y abrazos.